Depósitos de grasa: abdomen, cartucheras y flancos
La grasa que no se va ni haciendo dieta
Es habitual observar que incluso tras realizar una dieta adecuada y recuperar peso, persistan depósitos de grasa en zonas concretas. Estos depósitos son habituales en abdomen (tanto por encima como por debajo del ombligo), flancos, zona intermedia de espalda, cartucheras…
Por mucho que intentamos eliminarlos mediante ejercicio, infiltraciones o tecnologías como la radiofrecuencia, los resultados no acostumbran a ser buenos.
En los últimos años ha aparecido una nueva tecnología que nos ayuda a eliminar estos depósitos. Es la criolipolisis Cooltech.
Criolipolisis Cooltech la solución a los depósitos de grasa
La criolipolisis Cooltech aprovecha un hecho diferencial del tejido graso que es su especial sensibilidad al frío. Los desarrolladores de esta tecnología se basaron en la evidencia de que personas que habían sufrido congelaciones mostraban en las zonas afectadas una disminución del tejido graso. Basándose en esa observación desarrollaron unos equipos destinados a provocar una congelación controlada de la grasa corporal.
Estos equipos se aplican en las zonas donde hay depósitos de grasa localizados. A través de succión este tejido es empujado al interior del cabezal del equipo y se inicia un proceso de congelación progresiva. Este proceso dura 70min tras los cuales se retira el manípulo y se masajea la zona tratada.
Las células del tejido graso tratado inician un proceso conocido como apoptosis o muerte celular programada. Básicamente se eliminan, pero de forma lenta y gradual. Esto evita que la grasa que contienen sea liberada y pueda pasar al torrente sanguíneo e incluso depositarse en otros tejidos.
Enfriar la grasa sin dañar la piel, requisito fundamental para evitar complicaciones
La piel de la zona tratada también entra en contacto con el manípulo. Para evitar que esta sufra también un proceso de congelación se aplica una membrana con un procucto anticongelante. El sensor de temperatura del manípulo de Cooltech junto con la aplicación de este producto permiten controlar el proceso para evitar que la piel sufra ningún daño.
Unos resultados progresivos y evidentes en unas cuantas semanas
El proceso de apoptosis es gradual y por ello también lo son los resultados. Puede tardar hasta 3 meses en completarse, momento en el que se realiza la evaluación final del tratamiento. Si bien esto es así, ya pasadas 2-3 semanas la mayoría de pacientes observan ya una mejoría en las zonas tratadas. Pasados 3 meses se valorará la necesidad de realizar una segunda sesión de tratamiento Cooltech.
Resultados con tan solo 1 o dos sesiones de tratamiento
Con cada sesión de tratamiento con Cooltech se consigue reducir un 25-40% del tejido graso de la zona tratada. Dependiendo de la cantidad de grasa local se precisarán entre 1 y 2 tratamientos por zona. La mayoría de pacientes observan una mejoría suficiente con tan solo una sesión. En zonas de aplicación más compleja como cartucheras, muslos o glúteos, es más habitual precisar una segunda sesión de tratamiento.
Un tratamiento ideal para diversas localizaciones
Cooltech se puede aplicar en cualquier zona donde se produzcan depósitos localizados de grasa. Las zonas más habitualmente demandadas son los flancos, cara anterior de abdomen, zona subescapular de la espalda y cartucheras. También se puede aplicar Cooltech en ciertos casos en cuello (papada), brazos y cara interior de muslos.
Buena tolerancia y ausencia de dolor
Durante la aplicación de Cooltech se puede producir una discreta molestia al iniciarse la congelación del tejido graso. Una vez retirado el manípulos se procede a masajear el tejido congelado. Este masaje resulta, especialmente en algunas zonas como flancos, algo molesto.
Una vez finalizado el tratamiento es relativamente frecuente percibir una anestesia (es decir falta de sensibilidad) de la piel de la zona tratada, que puede persistir varias semanas. Solo ocasionalmente se ha descrito la persistencia de dolor en la zona tratada durante las semanas posteriores al tratamiento.